De repente caí por una cascada, todo terminó y volvió a empezar, la vida cambió de nombre, morí.
Navegando sin forma me encontré con dos que se unían, me metí en ellos para tener otro cuerpo, sonido de voz, lengua, piernas, hemisferios, y una mente engañada por percepciones tiranas.
Ahora estoy dentro de algo, me alimenta un ombligo. Giro en mi espacio y comprendo que los finales son los principios, y los principios finales, la vida y la muerte sólo ilusiones y el mundo un sueño.
Tiembla, el espacio se colapsa, el agua se va y la luz encandila, un túnel me avienta al oxìgeno, alguien grita de dolor, y a mi me duele saber que otra vez, estoy naciendo.
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